Francis Millet

Francis Millet

lunes, 25 de noviembre de 2013

Requisitos de la memoria

Valentine Cameron Prinsep



En medio de la vorágine que vivimos, la velocidad del tiempo y los límites de espacio nos hace vulnerables al olvido, hasta que nos sorprende la memoria despierta con una imagen, una palabra escrita, un sonido, una pequeña brisa. Para esclarecer en lo posible nuestra frágil leyenda se hace necesario una verdadera profesión de fe. Con este atributo indagamos todos los caminos andados hasta el presente, sin caer en las dudosas intenciones de los iniciados en vivencias paralelas. Una memoria distante pero sugestiva está por encima de cualquier estudio. En nosotros queda depositado el poder de interpretarla y entregarnos a ella.

 

2 comentarios:

ANTONIO CAMPILLO dijo...

Pilar, un texto excelente.Un pensamiento excelso. Un sentimiento que debería pertenecer a lo imperecedero del alma siempre y tenerlo en cuenta en todo momento. Cuando pensemos, recordemos, iniciemos una introspección personal y nos olvidemos de un entorno que nos va asfixiando con su descarada, si no nula, preocupación por el pensamiento humano. Me has impresionado y te he releído y lo seguiré haciendo siempre que necesite una ayuda para seguir, para no olvidar, para vivir.

Un fuerte abrazo, querida Pilar.

Carla Tormenta dijo...

El alma no olvida querida.
Gracias por tanta belleza.