
Metlicovitz (1868-1944)
El sol ya decaído se retiró a su oscuro reino y el cielo en su horizonte se hizo violeta. La bulliciosa vida ha quedado muda y espera que la noche se vista su traje ceniciento. Sobre la mesa muere en un vaso una rosa olvidada y en el rincón un piano descansa, hasta que llegue la mano que le haga reír ...
Díme, ¿es esta la hora mística y dorada de que hablan los poetas?